Para impulsar los cambios que queremos en este proceso constitucional la participación ciudadana inclusiva es fundamental para su implementación. Es un derecho por el que seguiremos trabajando ✊🏽
Hace un par de semanas, junto a diversas organizaciones de la sociedad civil decidimos reunirnos para reflexionar y dialogar sobre nuestros desafíos comunes para este 2023, particularmente, sobre los desafíos que supone la implementación de una nueva etapa en el proceso constituyente y nuestro rol, con especial énfasis para nosotros en la garantía del derecho a la participación ciudadana inclusiva en la nueva constitución.
Al respecto, y a partir de nuestra experiencia y trabajo de incidencia por resguardar este derecho, compartimos algunas observaciones al proyecto de reforma constitucional que habilita esta nueva etapa, haciendo énfasis en nuestras propuestas para que la participación ciudadana pueda estar presente como un campo de acción específico y con un soporte pertinente para su adecuada implementación durante el proceso.
Nos parece imprescindible incorporar mecanismos con estándares mínimos de participación ciudadana en los procesos constituyentes adicionales a la elección de consejeros y del plebiscito de salida. Esto dice relación con la legitimidad y el compromiso de la ciudadanía no solo con el proceso sino también con el texto y como él refleja nuestra cultura política. En la experiencia comparada tanto en latinoamérica como el mundo, el impacto, cercanía o incluso afección que las sociedades muestran frente a las constituciones es proporcional a la amplitud de los acuerdos, el compromiso y la participación durante la redacción del texto y la toma de decisiones posterior.
Es crucial que para que la participación sea efectiva, inclusiva y dote de legitimidad a este nuevo proceso, se lleve a cabo acorde a estándares mínimos como: i. acceso a la información (pertinente, clara, cercana, transversal) ii. cuente con espacios diversos de difusión de los mecanismos a utilizar para su convocatoria; iii. que exista acceso universal en los espacios de participación (presenciales y virtuales); iv. que exista una devolución y trazabilidad, que permita a la ciudadanía conocer de forma clara el efecto que tuvieron sus propuestas en el debate y/o los resultados de su participación.
Para que la participación sea eficiente y cumpla su rol de incidencia, debe tener llegada en todas sus formas posibles a todos los grupos de la sociedad, incluyendo pueblos originarios, al pueblo afrochileno, a personas con discapacidad, personas privadas de libertad y personas mayores, todos con particularidades de acceso a la información y mecanismos de participación pertinente a su realidad. Finalmente, es fundamental contar con una Secretaría Técnica u otro Comité, que permita a las universidades llevar a cabalidad su mandato y que se incorpore a otros sectores como Municipios y Organizaciones de Sociedad Civil, y que además, cuente con presupuesto asociado, para recursos humanos, implementación/logística y sistematización.
Creemos que los mecanismos de participación así como los órganos que le den soporte a estos procesos participativos, deberían haber quedado explicitados en el texto de la reforma constitucional, ya que ellos son una manifestación de la voluntad política de profundizar la democracia, el ejercicio de los derechos políticos y la garantía necesaria para el derecho a la participación ciudadana. Sin embargo, no fue, frente a ello, el trabajo articulado de las organizaciones en esta materia, será clave para cortar de cierta legitimidad a una nueva etapa que proviene sólo desde un sector, el político.
Marcela Guillibrand De la Jara, Ahora Nos Toca Participar.